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13 Sep

FORMACIÓN PERMANENTE DEL CLERO DE GALICIA

Participaron más de dos centenares de sacerdotes

Con el lema “25 años de las reuniones de los curas de  Galicia : viviendo la comunión” se desarrolló  en Monasterio de la localidad de Poio ( Pontevedra) la  Semana de Formación Permanente del Clero de Galicia que cumplió sus bodas de plata y en la que participaron más de dos centenares de sacerdotes .La inauguración estuvo presidida por el arzobispo de Santiago, monseñor Julián Barrio, y el cardenal Beniamino Stellla, prefecto de la Congregación para el Clero. En el encuentro que surgió a raíz de la publicación de la Exhortación apostólica postsinodal “Pastores dabo vobis”, que insistía en la importancia de la formación permanente en sus diversas dimensiones, se dio a conocer la Carta Pastoral de los obispos de la Provincia eclesiástica de Santiago “Sobre algunos aspectos actuales de la vida de comunión en nuestras iglesias particulares”.

Formación sacerdotal

El cardenal Stella pronunció la primera ponencia “La vida y el ministerio del sacerdote hoy”, haciendo un repaso de las jornadas vividas desde el 93 y presidió la celebración de la Eucaristía. En su intervención se centró en los contenidos y los desafíos de la nueva Ratio Fundamentalis Institutionis Sacerdotalis. Se trata del documento que marca las líneas de la formación sacerdotal, tanto en lo que se refiere a la formación inicial en los Seminarios como a la Formación Permanente de los ya ordenados. En su intervención el cardenal Stella insistió en la necesidad de formar sacerdotes que sean maestros en el discernimiento, hombres prudentes y compasivos, que muestren el rostro materno de la Iglesia y que sean signos de misericordia. Consideró que es fundamental cuidar la Formación Permanente en sus dimensiones humana, espiritual, intelectual y pastoral. Les pidió hacer el camino juntos, ayudándose mutuamente, “dejándose acompañar y arropar por los propios hermanos del Presbiterio”.

Carta pastoral

En su carta Pastoral los obispos de la provincia eclesiástica de Santiago profundizan en aspectos actuales de la vida de comunión en nuestras iglesias particulares y hacen un llamamiento a una conversión pastoral. Analizan las dificultades en el ejercicio del ministerio pastoral con temas referidos al sacerdote, hombre de Dios al servicio de la Iglesia; la salvaguardar una sana laicidad; la pertenencia y vida presbiteral, y la adecuada comprensión de los bienes de la Iglesia; profundizan en la Iglesia como misterio de comunión, y finalizan agradeciendo los dones de Dios.Como Obispos de la Iglesia en Galicia, “somos conscientes de la vocación y misión que el Señor nos ha encomendado”. Constatan que se ven apremiados “a dirigir esta carta pastoral conjunta a todo el pueblo católico que vive su fe en las distintas comunidades cristianas desplegadas por la vasta geografía de esta tierra”. En la carta se recuerda que el sacerdote “es un enviado del Señor para ser servidor fiel y solícito de la Iglesia, que no tiene fronteras”.El documento pastoral concluye del modo siguiente: “Queremos manifestar nuestro agradecimiento a todos los fieles cristianos con los que caminamos unidos en nuestras Diócesis y, si cabe, de manera especial a todos los sacerdotes, colaboradores del Orden Episcopal en la Iglesia en Galicia, por su generosidad, disponibilidad y dedicación pastoral”.

Cuarto de siglo

El obispo de Tui-Vigo, monseñor Luis Quinteiro Fiuza, pasó revisión a los 25 años de las Jornadas de Poio (1992/2017), con un recuerdo especial a los grupo de delegados para el Clero de Galicia que, con el apoyo de sus obispos, pusieron en marcha la iniciativa de Formación Permanente.El vicario judicial de Alcalá de Henares y párroco de Sto. Domingo de Algete (Madrid), José María Sánchez de la Madrid, explicó el funcionamiento de su parroquia y habló  de la renovación pastoral, basándose en la experiencia de la parroquialLas jornadas concluyeron con una mesa redonda en la que participaron Antonio Rodríguez Basanta, delegado episcopal para el Clero de Mondoñedo-Ferrol, Carlos Álvarez Varela, rector del seminario mayor de Santiago y Ángel Feijóo Mirón, rector del seminario mayor de Ourense. Los participantes profundizaron en la influencia de la «Pastores Dabo Vobis» en los Presbiterios diocesanos, en los Seminarios y en el proceso de elaboración del nuevo Plan de Formación.Destacar dos talleres de trabajo: “La música en la nueva edición del Misal Romano”, dirigido por Óscar Valado, director del secretariado de Música Sacra de Santiago; e “Itinerario de formación cristiana de adultos”, coordinado por un equipo de Acción Católica de Mondoñedo-Ferrol.Los miembros del clero presentes en el Monasterio de Poio asistieron a talleres, ponencias, mesas redondas y coloquios de temática diversa. Compartieron testimonios de vida y experiencias pastorales, oraron y celebrado la liturgia juntos. 

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