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28 Nov

Vieiro quiere abrir los fines de semana y cobijar a los sintecho[:gl]Vieiro quere abrir as fins de semana e dar cobillo ós senteito

El arzobispo se comprometió a atender la petición de los usuarios

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SUSANA LUAÑA  SANTIAGO / LA VOZ  DE GALICIA

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El frío del cuerpo y del alma secura con un café caliente y algo de compañía en el centro Vieiro que gestiona Cáritas en Costa Vella. Pero las instalaciones permanecen cerradas los fines de semana, y foto-la-vozlos sintecho que hicieron de ese servicio su hogar, se quedan en la calle los festivos, algo que se hace todavía más duro ahora que las temperaturas enfrían las entrañas. Porque tampoco hay alternativas en Santiago, tal y como explicaron ayer los usuarios al arzobispo, Julián Barrio, que visitó las instalaciones con motivo de las jornadas de puertas abiertas que celebra el centro para dar visibilidad a quienes la vida los dejó en la calle.

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Aunque los usuarios ya hace días que recogen firmas para pedir que Vieiro abra también los fines de semana, quien ejerció de portavoz ante el arzobispo de Santiago fue Mónica, una usuaria en silla de ruedas que le explicó lo duro que es pasar 48 horas en la calle, que el fin de semana se vuelve muy largo. Julián Barrio recogió el guante: «La situación de ustedes a mí no me es indiferente -les dijo-. Vamos a pensar una solución».

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La solución pasaría por un cambio de turno entre los trabajadores o la contratación de más personal. Tal y como explicó la responsable del centro, Patricia Camiña, «nosotros los apoyamos y creemos que se puede llegar a una solución».

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Las negociaciones tuvieron lugar en un ambiente muy familiar en el que el arzobispo compartió la soleada mañana de ayer con los usuarios que agradecían tener las instalaciones abiertas un domingo para tomar un café, compartir un trozo de rosca o entregar un regalo a Julián Barrio, que lo agradeció con una amplia sonrisa: «Ustedes son maestros en una escuela por la que todos deberíamos pasar», les dijo.

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Ampliar el servicio será más fácil el próximo año, cuando Vieiro se traslade a las nuevas instalaciones de Carretas, que ahora están en obras. «Pensamos que este año cuando viniese el arzobispo ya estaríamos allí, pero no pudo ser; tardaron un año en concedernos la licencia», se quejaba Anuncio Mouriño, director de Cáritas Diocesana de Santiago. En la rehabilitación del local se van a invertir 400.000 euros, pero el esfuerzo económico se hace necesario para atender las necesidades de los 120 usuarios que a diario pasan por Vieiro para tomar un café caliente, darse una ducha, acudir a los talleres o simplemente compartir una charla en el lugar que más se parece a su hogar perdido.

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SUSANA LUAÑA  SANTIAGO / LA VOZ  DE GALICIA

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O frío do corpo e da alma curase con un café quente e algo de compañía no centro Vieiro que xestiona Cáritas en Costa Vella. Pero as instalacións permanecen cerradas as fins de semana, e foto-la-vozos sinteito que fixeron dese servicio o seu fogar, quedan na rúa os festivos, algo que se fai todavía máis duro agora que as temperaturas enfrían as entrañas. Porque tampouco hai alternativas en Santiago, tal e como explicaron onte os usuarios ó arzobispo, Julián Barrio, que visitou as instalacións con motivo das xornadas de portas abertas que celebra o centro para dar visibilidade a quen a vida os deixou na rúa.

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Ainda que os usuarios xa fai días que recollen firmas para pedir que Vieiro abra tamén as fins de semana, quen exerceu de portavoz ante o arzobispo de Santiago foi Mónica, una usuaria en silla de rodas que lle explicou o duro que é pasar 48 horas na rúa, que o fin de semana se volve moi largo. Julián Barrio recoleu o guante: «A situación de vostedes a mín non me é indiferente -dixolles-. Imos pensar unha solución».

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A solución pasaría por un cambio de turno entre os traballadores ou a contratación de máis persoal. Tal e como explicou a responsable do centro, Patricia Camiña, «nos apoiamolos e cremos que se pode chegar a unha solución».

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As negociacións tiveron lugar nun ambiente moi familiar no que o arzobispo compartiu a soleada mañá de onte cos usuarios que agradecían ter as instalacións abertas un domingo para tomar un café, compartir un trozo de rosca ou entregar un regalo a Julián Barrio, que o agradeceu con un amplo soriso «Vostedes son maestros nunha escola pola que todos deberíamos pasar», dixolles.

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Ampliar o servicio será máis sinxelo o próximo ano, cando Vieiro se traslade ás novas instalacións de Carretas, que agora están en obras. «Pensamos que este ano cando viñese o arzobispo xa estaríamos alí, pero non puido ser; tardaron un ano en concedernos a licencia», queixabase Anuncio Mouriño, director de Cáritas Diocesana de Santiago. Na rehabilitación do local vanse invertir 400.000 euros, pero o esforzo económico faise necesario para atender as necesidades dos 120 usuarios que a diario pasan por Vieiro para tomar un café quente, darse una ducha, acudir ós talleres ou simplemente compartir unha charla no lugar que máis se parece ó seu fogar perdido.

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