Cáritas ofrece clases de refuerzo escolar a 30 niños de Padrón
Cáritas ofrece clases de refuerzo escolar a 30 niños de Padrón
\r\nTodos pertenecen a familias desestructuradas o sin recursos económicos\r\n\r\n \r\n\r\nUXÍA LÓPEZ/ La VOz de Galicia\r\n\r\n\r\n\r\nEl grupo de escolares es muy variado en edades pero, aún así, reciben atención personalizada\r\n\r\nPor tercer año, Cáritas Parroquial de Padrón tiene en marcha las clases de apoyo escolar para niños de familias sin recursos o desestructuradas. Comenzaron a la par que el curso escolar y, en la actualidad, asisten casi 30 niños, desde cuatro a doce años, todos del municipio de Padrón y cuya situación familiar fue valorada por Cáritas antes de entrar en el grupo.\r\n\r\nLa iniciativa se consolida año tras año gracias a la inestimable ayuda y colaboración desinteresada de las dos profesoras del grupo, Lola Paz y Ana Limes, la primera de ellas jubilada, y de tres voluntarias que también ponen su grano de arena para que los niños aprovechen al máximo el tiempo de las clases, que se celebran cada martes y jueves en los locales que Cáritas Parroquial tiene en el edificio pegado a la iglesia.\r\n\r\n«Son niños de familias que no pueden pagar una pasantía privada o, en otros casos, de familias con graves problemas sociales», explica el cura-párroco de Padrón, Roberto Martínez, uno de los principales impulsores de la iniciativa. El sacerdote alaba la dedicación de las dos maestras y de las tres voluntarias «sin cuyo compromiso no podría hacerse nada de esto, teniendo en cuenta que le dedican a las clases dos tardes por semana», dice. A las profesoras y a las voluntarias, a todas, se les alegra y mucho la cara cuando, nada más empezar la clase el pasado jueves, llegan un par de alumnas y, sonrientes y contentas, les cuentan que «saquei un sete no exame», dice una, «e eu un seis», afirma la otra, notas por las que reciben un aplauso del grupo a petición de las maestras.\r\n\r\nAl comentario de la periodista de qué felices se ven las niñas con un seis y un siete de nota, una de las maestras aclara que, «por desgracia, esa nota non é o normal, máis ben sempre é por debaixo». Las profesoras trabajan con los alumnos en función de sus necesidades educativas, que les apuntan desde los colegios en los que estudian o desde la educadora familiar del Concello. En este sentido, les trasladan también sus felicitaciones por el buen trabajo hecho en las clases de refuerzo.\r\n\r\nMaterial didáctico\r\n\r\nEn cuanto al material didáctico necesario lo obtienen a través de Cáritas Parroquial, pero también reciben donaciones de particulares. De hecho, ya disponen de una pequeña biblioteca con nada menos que 343 libros, todos donados, desde una enciclopedia para adultos a otra infantil y textos de todos los niveles de educación, además de un esqueleto.\r\n\r\nPero no todo es estudiar y aprender. De vez en cuando, el grupo se toma un pequeño descanso y desconecta para celebrar una «merienda especial» o una fiesta, momentos en los que se refuerza la unión del grupo. La intención de Cáritas es seguir con las clases, siempre que continúe la dedicación de las maestras y las voluntarias, ante los buenos resultados obtenidos.
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