EN DOS AÑOS CRECIERON UN 34 % LOS CASOS DE MUJERES SIN TECHOEN DOS AÑOS CRECIERON UN 34 % LOS CASOS DE MUJERES SIN TECHO
Marga Mosteiro ( La Voz de Galicia)
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En Santiago hay 220 personas que pasan la noche al raso cada día. Cáritas Diocesana asegura que recurren a los portales, cajeros automáticos, a la dársena de Xoán XXIII y a casas en ruinas para dormir porque no disponen de recursos económicos para pernoctar en pensiones o alquilar viviendas. En toda la diócesis compostelana, 1.800 personas duermen en la calle. Otros muchos recurren al albergue de Xoán XIII, que supera con creces su capacidad cada día. En este drama social, las mujeres tienen una representación numérica reducida, pero desde hace tres años los responsables de Cáritas alertan de un crecimiento imparable de las mujeres sintecho. Del 2011 al 2013 se ha producido un incremento del 34 %, pasando de 65 a 71 solo en los últimos meses. En el centro Vieiro, la entidad atendió a 3.400 personas desde que abrió sus puertas, lo que supone una media de 130 diarias. Otro dato que alerta de las dificultades económicas de cientos de compostelanos son las 35.224 comidas asumidas por Cáritas hasta octubre de este año, que son 800 más que el pasado año en el mismo período.
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De las personas que duermen diariamente a la intemperie y que son controladas por Cáritas, el 35 % «padecen algún tipo de enfermedad mental» y un 50 % presentan más problemas físicos que un ciudadano corriente. En el grupo de los sintecho, el 15 % padece alguna discapacidad. La mayoría están solteras (51,7 %), son viudos un 3, 1%; el 16 % están casados o tienen pareja; y un 28 % son separados o divorciados. Más de la mitad de las personas sintecho en la calle son «víctimas de alguna agresión».
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Cáritas Diocesana dedicará los próximos meses para sensibilizar a la Administración, a los medios de comunicación y a la sociedad en general acerca de que los «sintecho son un drama social» en el que deben «implicarse todos». En este sentido, la organización reclama a la Administración que las personas que duermen en la calle tengan acceso a la asistencia sanitaria y a las medicinas de forma gratuita. Asegura que el 68 % de las personas sin hogar no tienen tarjeta sanitaria, lo que implica que «una mayor exclusión social y, en determinados casos, un trato no adecuado por parte de los facultativos y una estigmatización por parte de la sociedad en general». Cáritas indicó que la reforma sanitaria «supuso un cambio de modelo que afecta fundamentalmente a las personas desprotegidas».
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