LA CRISIS DEJÓ A MIL FAMILIAS DE NOIA EN MANOS DE CÁRITAS LA CRISIS DEJÓ A MIL FAMILIAS DE NOIA EN MANOS DE CÁRITAS
La organización religiosa se ve desbordada por el imparable incremento de peticiones// Duplicó las ayudas respecto a 2010
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Manolo Gil
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El Correo Gallego – Noia
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Los servicios parroquiales de Caritas de Noia atendieron en lo que va de año a mil familias, frente a las 500 del mismo periodo de 2010, según los datos presentados por el presidente de la organización religiosa, José Luis Rodríguez Hermo. La falta o insuficiencia de ingresos, es decir las necesidades económicas o de bienes y servicios, motivó este incremento debido, principalmente, a que muchas personas que se encuentran en paro agotaron la prestación.
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José Luis Rodríguez Hermo explica que de los nuevos solicitantes de ayuda contabilizados, una buena parte fueron personas que por primera vez tuvieron que recurrir a Cáritas para subsistir. La crisis económica ha trastocado la vida de cientos de familias del municipio y de la comarca y eso se ha traducido en la aparición de nuevos perfiles entre los demandantes, como autónomos cuyas empresas han quebrado y se ven acuciados por las deudas; inmigrantes que han perdido el trabajo y, por tanto, el permiso de residencia y cualquier derecho a prestación; o parados mayores de 45 años, muchos de ellos divorciados, obligados a regresar al domicilio paterno.
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Este último perfil arrastra a otro: el de viudas de entre 70 y 80 años con una pensión no contributiva que deben ayudar a sus hijos y que no tienen más remedio que acudir a la onegé para sobrevivir. Otro de los sectores más afectados, según apunta, es el de las mujeres separadas con cargas familiares.
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El presidente de Cáritas Noia señala que esta situación empieza a ser «preocupante», ya que 20 de estas familias no tienen ni un solo ingreso. En los seis primeros meses del año, la organización religiosa repartió 25.000 kilos de alimentos. Aún así, asegura que en las aportaciones también se está notando la crisis, «pues tenemos menos donaciones de productos como azúcar o aceite».
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Otro de los servicios que presta Cáritas es el de las ayudas en dinero para abonar recibos básicos como el de la luz o desplazamientos a hospitales y consultas de especialistas o por problemas judiciales. En este caso, la ONG paga directamente estos servicios a aquellas personas que carecen de ingresos.
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Cáritas Noia, que también dispone de un servicio de ropero, dispone de 22 voluntarios de entre 30 y 70 años y, además de los servicios diarios, organizada dos campañas especiales: en Navidad y Corpus.
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Nuevos perfiles Las consecuencias de la crisis y la pérdida de empleo, paralela a la pérdida de prestaciones por desempleo, al haber agotado éstas ha llevado a numerosas familias noiesas y de la comarca a recurrir por primera vez a esta organización religiosa. Así se desprende de los datos aportados por el presidente de Cáritas Noia.
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La organización religiosa se ve desbordada por el imparable incremento de peticiones// Duplicó las ayudas respecto a 2010
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Manolo Gil
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El Correo Gallego- Noia
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Los servicios parroquiales de Caritas de Noia atendieron en lo que va de año a mil familias, frente a las 500 del mismo periodo de 2010, según los datos presentados por el presidente de la organización religiosa, José Luis Rodríguez Hermo. La falta o insuficiencia de ingresos, es decir las necesidades económicas o de bienes y servicios, motivó este incremento debido, principalmente, a que muchas personas que se encuentran en paro agotaron la prestación.
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José Luis Rodríguez Hermo explica que de los nuevos solicitantes de ayuda contabilizados, una buena parte fueron personas que por primera vez tuvieron que recurrir a Cáritas para subsistir. La crisis económica ha trastocado la vida de cientos de familias del municipio y de la comarca y eso se ha traducido en la aparición de nuevos perfiles entre los demandantes, como autónomos cuyas empresas han quebrado y se ven acuciados por las deudas; inmigrantes que han perdido el trabajo y, por tanto, el permiso de residencia y cualquier derecho a prestación; o parados mayores de 45 años, muchos de ellos divorciados, obligados a regresar al domicilio paterno.
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Este último perfil arrastra a otro: el de viudas de entre 70 y 80 años con una pensión no contributiva que deben ayudar a sus hijos y que no tienen más remedio que acudir a la onegé para sobrevivir. Otro de los sectores más afectados, según apunta, es el de las mujeres separadas con cargas familiares.
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El presidente de Cáritas Noia señala que esta situación empieza a ser «preocupante», ya que 20 de estas familias no tienen ni un solo ingreso. En los seis primeros meses del año, la organización religiosa repartió 25.000 kilos de alimentos. Aún así, asegura que en las aportaciones también se está notando la crisis, «pues tenemos menos donaciones de productos como azúcar o aceite».
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Otro de los servicios que presta Cáritas es el de las ayudas en dinero para abonar recibos básicos como el de la luz o desplazamientos a hospitales y consultas de especialistas o por problemas judiciales. En este caso, la ONG paga directamente estos servicios a aquellas personas que carecen de ingresos.
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Cáritas Noia, que también dispone de un servicio de ropero, dispone de 22 voluntarios de entre 30 y 70 años y, además de los servicios diarios, organizada dos campañas especiales: en Navidad y Corpus.
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Nuevos perfiles Las consecuencias de la crisis y la pérdida de empleo, paralela a la pérdida de prestaciones por desempleo, al haber agotado éstas ha llevado a numerosas familias noiesas y de la comarca a recurrir por primera vez a esta organización religiosa. Así se desprende de los datos aportados por el presidente de Cáritas Noia.
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