Noticia

11 Nov

¡NADIE SIN HOGAR!, UNA REIVINDICACIÓN PERMANENTE

La jornada central se celebra el domingo 25 de noviembre

Cumplido el trienio 2016/2018 de la Campaña Institucional

“¿Y tú qué dices? Di basta. Nadie Sin Hogar”, es el lema del Día de las Personas Sin Hogar cuyo acto central tendrá lugar el domingo día 25 de noviembre, y que sirve para interpelar a la sociedad, a las administraciones públicas, y también a nosotros, de que es necesario y urgente poner un límite a situaciones tan dolorosas, que suponen una grave vulneración de derechos, y que afectan a miles de personas. Decimos “¡basta!” a unas políticas públicas que no favorecen el acceso y ejercicio de derechos de las personas más vulnerables, principalmente el derecho a la vivienda.  Creemos que acabar con el sinhogarismo es posible con el compromiso real de las administraciones públicas y la sociedad en su conjunto. Desde la permanente reivindicación insistimos en que “así no”, en relación a la inacción desde los estamentos públicos y de la cada vez más desigual sociedad en que vivimos.

En la Campaña se presentan elementos que explican que acabar con el sinhogarismo es posible, imprescindible y urgente. Y se dan a conocer propuestas concretas: desde la prevención, el acompañamiento, o la mirada de derechos. Las iniciativas se centran fundamentalmente en una visión sobre la vulneración del derecho humano a la vivienda.

 “Estoy tan cerca que no me ves”

Este año se interpela como sociedad. Y se hace en base a dos ideas claras. La visibilidad dicha por las propias personas en situación de sin hogar: “Estoy tan cerca que no me ves”. Y un mensaje a quien lo lea para que se movilice, se implique y pida soluciones: “¿Y tú qué dices? Di basta. Nadie Sin Hogar”.

La fecha central de la Campaña coincide con el Día Mundial de la eliminación de la Violencia contra la Mujer. Por tal motivo se ha desarrolló un apartado especial teniendo en cuenta que la realidad de las mujeres sin hogar requiere una especial atención, cada vez es más evidente, en nuestros proyectos, ya que presentan una mayor vulnerabilidad y sufren mayores riesgos de agresiones,

Cinco años de trabajo

Hemos cumplido el último año del trienio de Campaña 2016-2018, con el objetivo de que toda persona viva con dignidad en un hogar propio, en paz y permanente. Seguimos apostando por la centralidad absoluta de las personas en situación de sin hogar, y por mantener la mirada de derechos de manera global a la vez, todos los días, en todas partes.

El trienio se fundamentó en la idea de generar tejido inclusivo, de red, conformada por tres ejes principales que se pusieron en valor cada año: Dignidad en 2016; Derechos en 2017, y Posibilidad en 2018.Los tres interrelacionados y entramados por dimensiones principales: individual, colectiva, comunitaria, ciudadana y de sociedad.

Por nuestra parte y para dar una más amplia dimensión a los trabajos desarrollados en los últimos tiempos, hemos ampliado el trienio a un total de cinco años 2014/2018, dada su importancia y significación, en los que los ejes centrales de cada uno de ellos, y por lo tanto la Campaña puesta en la calle, giró sobre los siguientes aspectos:

2014: “Por una vivienda digna. Nadie sin Hogar”

2015¨: “Por qué es posible. Nadie sin Hogar”

2016: “Por dignidad. Nadie sin Hogar”

2017: “Somos personas, tenemos derechos .Nadie sin Hogar”

2018: “¿Y tú qué dices? Di basta. Nadie Sin Hogar”

Y como cierre de trienio, después de centrarnos en elementos como la dignidad y los derechos, en 2018 afirmamos que Nadie Sin Hogar es posible, profundizando en una serie de claves fundamentales para acabar con el sinhogarismo, y sin renunciar a la esperanza y a la posibilidad de que términos como Nadie Sin Hogar sea una realidad.

Finalizamos el trienio-para nosotros un quinquenio-, con la esperanza e ilusión de que vayamos acabando con el sinhogarismo. El objetivo último de nuestras Campañas es que toda persona viva con dignidad en un hogar propio, en paz y permanente.

Las personas en el centro

Entre las numerosas frases que hicieron públicas las personas sin hogar, algunas de ellas fueron utilizadas en los lemas de campaña, destacamos estas: “No sé qué te alejas de mi pero no dejes de acercarte”, “Estoy cansado pero no vencido”, o “Escribo en defensa propia por ausencia ajena”.

Para comprender el sinhogarimos debemos vivir en una sociedad más justa y comprometida Una sociedad acogedora e inclusiva en una serie de aspectos .
-Poner a la personas en el centro

-Comprometerse con el ejercicio de sus derechos

-Ver las potencialidades y fortalezas de las personas y no sólo sus carencias

-Poner en valor a las personas y su dignidad.

Entre todos debemos impulsar la voluntad de generar el cambio, buscando el compromiso de toda la sociedad y, por supuesto, de las propias personas afectadas que sufren el sinhogarismo. El objetivo del trabajo a desarrollar es que puedan vivir con dignidad, en hogar propio, permanente y en paz.

Como propuestas imprescindibles para intentar terminar con este problema destacamos cinco:

-Política pública de vivienda

-Política de prevención del sinhogarismo

-Garantía de ingresos

-Mirada de derechos

-Acompañamiento social

Los datos hechos públicos con motivo de la jornada dan cuenta de una situación de emergencia residencial, de que son miles las personas sinhogar y millones las que se encuentran en riesgo de perder la vivienda o están en viviendas inadecuadas.

El bien común

Desde Cáritas apostamos por una sociedad del bien común. Una sociedad acogedora e inclusiva que pone a las personas en el centro y que se compromete con el ejercicio de sus derechos; que ve las potencialidades y fortalezas y no sólo sus carencias, y que las pone en valor, así como su dignidad por el simple hecho de serlo.

Queda mucho por hacer, y no debemos ni podemos permitimos bajar la guardia, ni nuestra voz reivindicativa, ni dejar de poner en valor los derechos y la dignidad de las personas en situación de sin hogar.

Tenemos que seguir insistiendo y sensibilizando en torno a la situación de este colectivo de personas, compartir y generar conocimientos, y movilizar para producir cambios. Que la sociedad se acerque y conozca la realidad de la exclusión residencial grave, y los rostros concretos de quienes más la sufren: las personas en situación de sin hogar. Debemos contribuir a que vivan mejor, a que puedan recuperar y poner en valor su dignidad, y accedan y ejerzan sus derechos. El objetivo último de la Campaña es que toda persona viva con dignidad Insistamos en que acabar con el sinhogarismo es posible, imprescindible y urgente. No olvidemos que nadie escoge libremente vivir en la calle, y que tener una casa no es un privilegio, es un derecho, de ahí que tengamos que seguir reivindicando que nadie se encuentre sin hogar, y que esto es un reto para todos nosotros

Con motivo de la campaña se desarrollarán numerosos actos a nivel diocesano, teniendo todos ellos como objetivo dar a conocer el Manifiesto en el que entre otras muchas cosas se nos recuerda que:  “Estoy tan cerca que no me ves”

La Campaña de este año fue la última que se celebró en el mes de noviembre después de 26 años desarrollándola en estas fechas. La de 2019 se pondrá en marcha con motivo de la Jornada Mundial de los Pobres, instaurada por el Papa Francisco en 2017.