Organización


En Cáritas la participación se lleva a cabo a través de:
  1. Voluntarios.
  2. Profesionales contratados.
  3. Socios, que colaboran económicamente de forma estable.
  4. Otras personas (físicas o jurídicas) que colaboran de forma esporádica.

La presidencia efectiva de Cáritas le corresponde al Arzobispo de la diócesis, como máxima autoridad jerárquica. Toda actuación de Cáritas Diocesana está sometida al pastor y sucesor de los Apóstoles en la Iglesia particular de Santiago de Compostela, al que también le corresponde la alta dirección de esta. Por sí mismo, o por su Delegado, establecerá criterios de actuación y normas de acción que estime pertinentes para el buen funcionamiento de Caritas, y la dirección ejecutiva le corresponde al Director.

Cáritas Diocesana se regirá por los siguientes Órganos Colegiados:

La Asamblea Diocesana: se reunirá con carácter ordinario cada dos años. Sus funciones son:

  1. Ratificar, si procede, la terna propuesta, en orden alfabética, por el Consejo Diocesana, para Director de Cáritas Diocesana, que debe ser considerada “in solidum”. En caso de no ser refrendada esa terna por la Asamblea ,el Director será nombrado directamente por el Arzobispo, que tendrá plena libertad para elegir una persona de esa terna u otra ajena a ella.
  2. Establecer criterios y orientaciones prácticas por los que regirán programas y proyectos de Cáritas
  3. Recibir cumplida información sobre la gestión económica y financiera desde la última Asamblea; así como pronunciarse sobre las líneas fundamentales y directrices que deben contener los presupuestos y evaluar el proyecto que, en su caso, presente el Consejo diocesano.
  4. Deliberar, por propuesta del Consejo Diocesano, sobre las modificaciones que se considere conveniente introducir en los Estatutos. El mismo Consejo las presentará al Arzobispo para su aprobación, si procede.
  5. Deliberar y hacer propuestas al Arzobispo sobre cualquier asunto no considerado en los Estatutos y que sea coherente con los fines propios de Caritas.
  6. Evaluar la actividad desarrollada por los departamentos diocesanos que se constituyan.

El Consejo Diocesano: se reunirá con carácter ordinario una vez al trimestre, y sus miembros serán designados por un período prorrogable de cuatro años. Constituyen sus funciones las siguientes:

  1. Presentar a la Asamblea una terna de candidatos, ordenada alfabéticamente, para Director de Cáritas Diocesana, salvo que el Arzobispo comunique su intención de hacer el nombramiento “motu propio”
  2. Aprobar la contratación y cese del personal profesional de Caritas en la diócesis, de acuerdo con la legislación vigente, actos que serán firmados por el Director diocesano. Está función podrá ser delegada, para casos urgentes o imprevistos, en una mesa de contratación compuesta por el Director, el Secretario General y el Administrador, dando cuenta en el Consejo siguiente de las contrataciones efectuadas.
  3. Concretar criterios, programas y proyectos de acuerdo con las orientaciones establecidas por la Asamblea Diocesana.
  4. Administrar los recursos de Caritas diocesana al servicio de la Comunicación Cristiana de Bienes.
  5. Aprobar en los seis primeros meses del año la memoria, balance y liquidación del presupuesto del año anterior; aprobar el presupuesto del ejercicio del año siguiente antes de finalizar el primer trimestre del año y presentar cada año rendición detallada de cuentas al Arzobispo.
  6. Disponer de los fondos y realizar todo tipo de actos de dominio y administración, pudiendo delegar estas funciones para casos puntuales y concretos.
  7. Tomar decisiones que se estimen necesarias para promover las actividades de Caritas diocesana, en consonancia con los criterios y orientaciones establecidas por la Asamblea diocesana y el Arzobispo
  8. Proponer a la Asamblea diocesana los criterios para la distribución de los recursos al servicio de la Comunicación Cristiana de Bienes
  9. Llevar a cabo, cuando y ante quien proceda, el discernimiento y actuación ante situaciones injustas.
  10. Estimular y aprobar la creación de Cáritas Parroquiales, interparroquiales y de zona pastoral, orientando y estableciendo criterios de colaboración.
  11. Resolver las propuestas de asociación que presentan las Instituciones de acción caritativa y promoción social, con la ratificación, si es el caso, por parte del Arzobispo.
  12. Mantener las relaciones y la necesaria coordinación con los organismos y entidades, tanto públicas como privadas.
  13. Llevar a cabo toda otra gestión que le sea encomendad por la Asamblea diocesana, de conformidad a los Estatutos.
  14. Las competencias que sobre bajas de miembros de Cáritas se atribuyen los Estatutos.
  15. Establecer el Orden del Día de la Asamblea Diocesana.
  16. Acordar el cambio de domicilio social, que debe ser aprobado por el Arzobispo.
  17. Autorizar la firma de convenios de colaboración con entidades eclesiásticas o seculares.

La Comisión Permanente es el órgano de seguimiento de los acuerdos del Consejo diocesano de Cáritas y la encargada de su cumplimiento. Se reunirá con carácter ordinario una vez al mes. Son sus funciones:

  1. Establecer el Orden del Día de las reuniones del Consejo diocesano. El reglamento de régimen interno podrá contemplar la posibilidad, si todos los miembros presentes del Consejo están conformes, de incluir otros puntos en el Orden del día.
  2. Resolver los asuntos de carácter ordinario que se pueda presentar en el funcionamiento de Caritas Diocesana, dando cuenta de esto al Consejo diocesano.
  3. Actuar como órgano ejecutivo del Consejo diocesana y preparar sus reuniones
  4. Establecer los criterios y el control del funcionamiento y coordinación interna del personal y de los servicios centrales de Caritas diocesana.
  5. Administrar el fondo operativo estables para préstamos retornables
  6. Todas aquellas otras funciones que le sean encomendadas o delegadas por el Consejo diocesano.
Unipersonales:
  1. El Delegado/a Episcopal
  2. El Director/a
  3. El Secretario/a General
  4. El Administrador/a
  5. Los/as Responsables de departamentos

En cuanto al territorio diocesano, se reparte en comunidades parroquiales, de donde brota el espíritu del servicio de la caridad, en estas parroquias.La agrupación de varias Cáritas parroquiales, que deciden aunar esfuerzos y recursos, da lugar a las denominadas Cáritas Interparroquiales, actualmente existentes en A Coruña, Santiago, Carballo, Arousa y Pontevedra.En la coordinación general de todos estos equipos humanos se encuentra Cáritas Diocesana de Santiago de Compostela.

ORGANOS DE DIRECCIÓN

La organización del trabajo que se desarrolla en Cáritas tiene tres niveles perfectamente definidos en los Estatutos: diocesano, parroquial e interparroquial o de zona pastoral. En ellos se encuadran como cargos más representativos, delegado episcopal, director diocesano, consiliario y director.

Delegado Episcopal. El arzobispo podrá nombre – artículo 13–, un delegado episcopal que le represente en los distintos órganos de Cáritas Diocesana. Las funciones que le corresponden están relacionadas con velar por la identidad de Cáritas; mantener una colaboración estrecha con el director diocesano y el consejo pastoral; promover orientaciones para la celebración de liturgias y las distintas campañas.

Director Diocesano. La dirección ejecutiva de Cáritas Diocesana le corresponde al director diocesano que ostenta la representación legal dela entidad ante cualquier institución eclesial o civil. Se encarga de convocar y dirigir las reuniones de la Asamblea diocesana, Consejo diocesano y comisión permanente. Es el representante de la institución a nivel nacional y regional, y firmar los contratos de relación laboral de los trabajadores de la institución.

Consiliarios y Directores. A nivel interparroquial o de zona pastoral, el consiliario es nombrado por el arzobispo a propuesta del delegado episcopal. Los directores son nombrados por el director diocesano a propuesta del Consejo interparroquial o de zona pastoral que se encargará de presentar una terna de candidatos. El nombramiento tendrá que ser ratificado por el arzobispo.El párroco/consiliario de las cáritas parroquiales, es el encargado de nombrar al director de la institución en éste área de actuación.

Voluntarios. Los voluntarios, como se les conocía tradicionalmente y ahora como Agentes, son elementos esenciales de la identidad para desarrollar la acción social de Cáritas y que implica realizar un servicio desinteresado, libre, gratuito y responsable en beneficio de la comunidad. Una labor en la que la persona es el centro de nuestra actuación, sobre todo con aquellas que viven en situación de pobreza y exclusión social. Los voluntarios son el principal activo, la columna vertebral, que tiene la institución que da gratis lo que recibe gratis: el amor. El voluntariado es un pilar básico e insustituible en la acción de Cáritas y representan más más del 90% de las personas que colaboran en los distintos niveles de la organización.